Seis motivos por los que cocinar con agua filtrada
Cuando cocinamos siempre intentamos hacer un buen plato, algo que realmente nos guste, diferente, casero. Si nos gusta cocinar y cuidarnos, normalmente escogemos los mejores ingredientes posibles para cada plato.
Sin embargo, ¿cuándo nos hemos preocupado del agua con la que cocemos nuestra pasta durante hora y media a fuego lento, o del guiso que llevamos preparando desde hace 3 horas, o el agua con la que hemos lavado nuestras frutas y verduras? Te explicamos seis motivos para cocinar con agua filtrada.
1. Cocinar con agua filtrada: Ni sales ni metales pesados
El agua que bebemos en botella, pese a no ser lo mejor del mundo, normalmente ha pasado unos filtros concretos, y aunque el agua de grifo está mucho más controlada, el trayecto hacia tu grifería por los tubos hace que acumule grandes cantidades de sal y metales. Cocinar con agua filtrada hará que desaparezcan todas estas sales y cal acumulada en el agua al salir del grifo a tu vaso.
2. Siente el sabor verdadero
Todo influye, y en esto está de acuerdo mucha gente. No es lo mismo hacerte un café con agua filtrada que sin filtrar. No es lo mismo un té con agua con sales e impurezas que un agua clara y limpia que absorba el sabor. Con los caldos, cocidos y demás, te puedes imaginar.
3. Evita posibles problemas
Si algo se resiente en el cuerpo del abuso de sales es claramente tu sistema nervioso y tus articulaciones. Si bien la cantidad que tomamos es muy pequeña cuando bebemos directamente de un grifo, también es cierto que todo depende de nuestro cuerpo. Cocinar con agua filtrada quita dichos riesgos. Si padecemos de alguna enfermedad relacionada con esto, está claro que deberemos filtrar nuestra agua.
4. Demasiado cloro
Este suele ser el mayor problema de todos: el exceso de cloro. En España, el principal componente que lleva en exceso el agua del grifo es el cloro y sus derivados. Esto es debido al intenso uso de este producto para purificar y limpiar el agua. Si bien no tiene porque pasarnos absolutamente nada, puede darnos mala sensación oler o saborear el cloro. Filtrando el agua, sencillamente te quitas del mal olor y sabor del cloro.
5. ¿Es potable el agua del grifo?
El agua del grifo en España es de alta calidad, potable y lista para beber como en cualquier lado de Europa Occidental. El agua pública es objeto de muchos controles estrictos y diarios, concretamente 527 en la provincia de Barcelona. En cambio, los controles para el agua embotellada son mucho menos restrictivos. En lugar de ello, deberías preocuparte por lo nocivo que llega a ser el componente BPA de las botellas de plástico.
6. No vas a tener que reciclar botellas de plástico
Mientras que animamos a todo el mundo a reciclar de forma sistemática, hay que entender que reciclar es solo una segunda opción dentro de las mejores en el consumo de agua. En lugar de eso, es mejor simplemente evitar la basura plástica. Las botellas de agua, aparte de tener menor control microbiológico, son insostenibles en su proceso y en su consumo, porque solo se recicla un 20% de todas las botellas de todo el mundo, y son mucho más caras, incómodas y pesadas de transportar y matan a millones de animales marinos cada año, muchos que actualmente están en peligro de extinción y que ingieren o quedan atrapados por el plástico: ping�inos, focas, ballenas, leones marinos.