Ejercicios para las várices
Los pacientes con várices se benefician de la práctica de ejercicios aeróbicos que ayudan al sistema cardiovascular en general y aumentan el tono de la región de la pantorrilla lo cual favorece el retorno venoso, los mejores ejercicios para los pacientes con várices son la caminata, la marcha, subir pendientes o escaleras y la natación.
Aún cuando se practiquen estas disciplinas y más aún si no es así, existen una serie de ejercicios destinados a mejorar el retorno venoso, aumentar el tono de las venas y mejorar el tono muscular de los miembros inferiores todo lo cual redundará en mejoría de la sintomatología, disminución de la velocidad de progresión y mejores resultados de las estrategias terapéuticas empleadas.
1.- Contracción y estiramiento de piernas:
Acostados, con los brazos detrás de la nuca (a), flexionar una pierna contrayéndola de manera tal que lleve la rodilla hacia el pecho, sin que la cintura se despegue del piso (b). Luego elevar la pierna hacia el techo para dejarla en posición recta (formando un ángulo de 90 grados con el torso). Baje lentamente la pierna estirada y sin flexionar hacia el piso. Repita el ejercicio de la misma forma con la otra pierna.
2.- Levantamiento de piernas (con movimiento de pies):
Acostados, con los brazos ubicados detrás de la nuca (a), elevar una pierna hasta formar un ángulo de 90 grados con el torso (b). Una vez que tiene la pierna en alto, mueva los dedos del pie hacia delante y hacia atrás. Realice este movimiento varias veces y luego descienda la pierna estirada en forma lenta hacia el piso. Repita el ejercicio con la otra pierna.
3.- Movimientos circulares de piernas (en suspensión):
Acostados, con los brazos estirados a los costados y la nuca sobre una almohada ligera, elevar las piernas hasta formar una ángulo de 45 grados con el torso. Una vez que las piernas permanecen en alto, mover los pies realizando movimientos circulares hacia dentro y hacia fuera. Realizar varios círculos y luego descender ambas piernas. Descansare y repetir una vez más el ejercicio.
4.- Movimientos de pie con pierna suspendida:
Acostados y con los brazos estirados a los costados, elevar una pierna hasta formar una ángulo de 45 grados con el torso. Una vez que la pierna permanece en alto, mover el pie realizando movimientos hacia delante y luego hacia atrás. Realice varios movimientos y luego descienda la pierna. Repita el ejercicio con la otra pierna y el otro pie.
5.- Movimientos de piernas al estilo «bicicleta»:
Acostados, elevar ambas piernas despegándolas del piso y sosteniendo las caderas con ambas manos, ubicando los brazos al costado del cuerpo. Realizar movimientos circulares alternados, como si estuviera pedaleando en una bicicleta. Haga los movimientos durante un par de minutos, descanse y repita nuevamente la serie.