15 consejos para prevenir la demencia senil
La demencia, demencia senil o senilidad no es una enfermedad única, sino que se refiere a un síndrome en el cual se ven afectadas áreas de la cognición, que pueden ser la memoria, la atención, el lenguaje y la resolución de problemas.
Entre las formas más comunes de demencia se encuentran: enfermedad de Alzheimer, demencia vascular, demencia frontotemporal, demencia semántica y la demencia con cuerpos de Lewy. Menos del 10% de los casos de demencia se deben a causas que, en la actualidad, se pueden revertir con tratamiento.
Los expertos advierten que si realmente queremos protegernos de la demencia senil, necesitamos comenzar a cuidar de nuestro cerebro desde la juventud. Pero, ¿qué podemos hacer para reforzar nuestra salud cerebral – y evitar la demencia? Aquí tienes 15 consejos que pueden ayudarte.
- Unirte a clubes u organizaciones que necesitan voluntarios. De esta manera no te sentirás perdido o inútil después de retirarte.
- Ten un hobby, o dos. Las aficiones ayudan a desarrollar un cerebro robusto, porque estará tratando algo nuevo y complejo.
- Has prácticas de escritura con tu mano no dominante varios minutos todos los días. Esto ejercerá el lado opuesto de tu cerebro y podrá en acción a tus neuronas.
- Caminar todos los días puede reducir el riesgo de demencia debido a que la salud cardiovascular es importante para mantener el flujo de sangre al cerebro.
- Lee y escribe todos los días. La lectura estimula una amplia variedad de áreas del cerebro que procesan y almacenan información. Del mismo modo, la escritura (no copiar) estimula muchas áreas del cerebro también.
- Aprende un nuevo idioma. Evidencia científica ha demostrado que las personas biling�es pueden retrasar los síntomas de la enfermedad de Alzheimer hasta por cuatro años. Y algunas investigaciones sugieren que cuanto antes un niño aprenda el lenguaje de signos, mayor será su coeficiente intelectual – y las personas con elevado coeficiente intelectual son menos propensas a tener demencia -.
- Practica juegos de mesa: como el scrabble y el monopolio. No sólo estarás ejercitando tu cerebro, estarás socializando también.
- Toma clases durante toda tu vida. El aprendizaje produce cambios estructurales y químicos en el cerebro, parece ayudar a la gente a vivir más tiempo. Los investigadores del cerebro han descubierto que las personas con títulos avanzados viven más tiempo – y si tienen la enfermedad de Alzheimer, esta solo se hace evidente en las etapas muy avanzadas de la enfermedad -.
- Escucha música clásica. Un volumen creciente de investigaciones sugiere que la música puede cablear el cerebro, mediante la construcción de vínculos entre los dos hemisferios. Cualquier tipo de música puede funcionar, pero hay algunas investigaciones que muestran efectos positivos para la música clásica, aunque los investigadores no entienden por qué.
- Aprende un instrumento musical. Puede ser más difícil de aprender cuando se tiene cierta edad, pero estarás desarrollando una parte inactiva de tu cerebro.
- Viaja. Cuando viajas (ya sea a un lugar de vacaciones distante o por una ruta distinta a través de tu ciudad), estás obligando a tu cerebro a navegar en un entorno nuevo y complejo. Un estudio de taxistas encontró que los conductores experimentados tienen cerebros más grandes, porque tienen que almacenar gran cantidad de información acerca de las ubicaciones y la forma llegar a estas.
- Aprende a meditar. Es importante para tu cerebro aprender a dejar fuera las tensiones de la vida cotidiana.
- Duerme lo suficiente. Los estudios han demostrado un vínculo importante entre la interrupción del sueño y la demencia.
- Come más alimentos que contienen ácidos grasos omega-3: salmón, sardinas, atún, trucha de mar, caballa o arenque, además de nueces (que son más altos en omega 3 que el salmón) y linaza.
- Come más frutas y verduras. Los antioxidantes en las frutas y verduras sanan algunos de los daños causados por los radicales libres, una de las principales causas de muerte de las células cerebrales.